10 cosas que no me gustan de Corea

By | 2013-11-02

Esta semana parece que toca quejarse. Así que ahí van mis 10 de cosas odiosas de Corea, sin orden específico.

1. La jerarquía de la sociedad
Los coreanos son gente muy amable y abierta, pero la sociedad está anclada en el pasado. Realmente sorprende aquí, en la tierra de los smart-phones. Hay que aparentar, evitar el “que dirán”, hacer lo que se espera de uno. Respetar hasta la estupidez al padre, al jefe, aunque uno sepa más. Si no te gusta el alcohol, pero tu jefe te lo sirve, nunca puedes decir que no.

En mi caso, en alguna ocasión he acabado cenando con un grupo de coreanos y el “jefe”, el de más estatus social, me “obligaba” a seguirle el juego: cosas como reírle las gracias sin sentido y no poder ir a casa hasta que él se levantara de la mesa, aun habiéndole indicado que era tarde y yo tenía mucho trabajo al día siguiente.

2. Los horarios de trabajo/ocio
Por esa jerarquía absurda hay que estar en la oficina hasta que el jefe se vaya. Y no es raro que el jefe se quede hasta tarde, para evitar ver a la mujer con la que se casó por prisas antes de los 30. Y si eres un empleado nuevo, hay quedarse en la oficina aun sin jefe, aunque sea no haciendo nada, hasta la medianoche. Toca aparentar. Igual sucede en las universidades, con alumnos pernoctando en las bibliotecas.

Si uno sale de noche de la oficina, los horarios de ocio se desplazan a la madrugada. En España la gente va a dormir a medianoche. En Corea, es normal que la gente esté despierta hasta altas horas de la madrugada, viendo shows en TV, cuyos presentadores tienen que hacer mucho ruido para que los espectadores no se duerman.

Ruido3. Ruidos
Hay 25 millones de habitantes en el área metropolitana de Seúl, viendo la TV de madrugada o bebiendo alcohol en el bar. Es imposible encontrar un lugar silencioso, pues incluso los parques públicos tienen hilo musical (esto realmente lo detesto).

Además, siempre hay obras. Mires donde mires los coreanos construyen infraestructuras y viviendas. Y pican el suelo, por supuesto sin ninguna protección (ni casco ni insonorizadores), para pasar más y más cables.

Building matrix4. Colmenas
¿Y donde metemos a 25 millones? En lo que llamaríamos colmenas. Arquitectura sin ninguna creatividad. Casas sin ventilación. Los coreanos tienen un gusto nulo en la construcción de edificios. Ni la URSS construía edificios tan feos.

También son un desastre remodelando. Por ejemplo, el caso de la puerta de Namdaemun tras un incendio, tesoro nacional número 1: no importó añadir detalles de decoración nuevos. O si vas las aldeas tradicionales de Bukchon o Jeonju, te encuentras casas construidas hace 2 años (eso si, muchas de ellas con aspecto de casa tradicional). Incluso se plantean remodelar Insadong, el barrio turístico por excelencia.

5. Relaciones chico-chica
La mezcla de poco tiempo libre y sociedad retrógrada repercute en las relaciones chico-chica. Una chica no puede dejar de vivir de la casa familiar hasta que se casa y debería casarse antes de los 30 (casi “con quien pueda”). Así que a la menor posibilidad de contacto, tantean el territorio.

En mi caso, hubo un tiempo que hacía intercambio de idiomas, coreano por español. Curiosamente el 90% de los estudiantes de español son chicas. Así que quedé con varias chicas: ir a una cafetería y practicar idiomas. Pero notaba que no habían venido “solo” a practicar español, sino también a “evaluarme” como posible marido. Parecían dar por sentado que habría una relación amorosa. ¡Nada más lejos de la realidad!

6. Mi ex-novia
Es broma.

Hot bulgogi7. Comida ardiendo y con prisas
En Corea me quemo la lengua una vez al mes. La regla en los restaurantes es que el plato debe salir borboteando a la mesa. Si no, el coreano podría quejarse. Esto tiene su sentido durante el durísimo invierno coreano, pero en las otras 3 estaciones no es necesario.

Además, es normal cocinar muchos platos en la misma mesa, con un fuego de gas o de carbón. En el caso del gas, tengo la costumbre de bajar la llama; hasta que segundos después la camarera vuelve a subirla. Porque en Corea hay que comer rápido y dejar la mesa para los siguientes comensales. Igualmente, no tardes más de 30 segundos en decidir un plato del menú, o te mirarán mal.

8. Motos por aceras
Uno de los efectos del querer la comida ardiendo es que las motos de reparto deben ir casi volando para entregar la comida bien caliente. Los motoristas toman la excusa y conducen por todos lados. La diferencia entre calzada y acera no existe. Los peatones solo son molestias que deben apartarse a su paso. Incluso el gobierno creó un ley para prohibir el uso de las motos en aceras, con nula aplicación.

9. Internet alternativo
En Corea solo se usa Internet Explorer como navegador, e Windows como sistema operativo. Es la tierra soñada de Microsoft. Esto hace que toda web coreana esté únicamente optimizada para Explorer, usando en muchos casos cosas muy específicas, como Active-X. Si no tienes esa configuración en el ordenador, ni te molestes.

Por otro lado, si no tienes número de identificación coreano (ya sea DNI o NIF o similar), tampoco te molestes. Años atrás el gobierno creó una ley que obliga a toda web coreana a mostrar el DNI de cada uno de sus usuarios. Un grave error que cerró la expansión internacional de muchos sitios web. Así que la web coreana evolucionó aparte. Cosas como que no se dice “foro”, se dice “cafe”. Cosas como bloquear el menú del botón derecho para que no copies ningún texto. Cosas como “romper” el botón de ir atrás.

Por cierto, Corea bloquea un montón de webs. Por ejemplo, las web de porno. Tampoco se pueden ver páginas relacionadas con Corea del Norte. Y, en alguna ocasión, incluso cosas inocuas como ¡webs de música!

10. Frío
En invierno hace un frío muy duro. Pero además, el invierno acaba siendo muy largo. A mitad de noviembre empiezan la temperatura baja a negativo. Y a principios de abril suele darse la última nevada. En enero y febrero hay que hacer una planificación previa antes de salir de casa. Por eso he decidido abandonar a mis amigos de Corea este invierno y volar a lugares más cálidos.


Esta entrada nace tras leer las cosas que no gustan a Felipe, Iván y Robert. Luego Arnau y yo nos apuntamos a dar nuestra opinión, y aquí queda. Por supuesto, también hay muchas cosas positivas en Corea, pero yo destacaría una: ¡la gente!

8 thoughts on “10 cosas que no me gustan de Corea

  1. Xanday

    Jejeje, toda esta entrada por lo de Grooveshark… qué cosas, pues vaya con la “censura”. :/

    Me gustaría saber cómo es vivir en una colmena, pero sospecho que vivir lo que se dice vivir es en la oficina y en la colmena vas, duermes y te vuelves (si es que te da tiempo).

  2. Sergio Andrés

    Me parece muy curioso lo de Internet Explorer y Windows. Soy un usuario únicamente de GNU/Linux, o sea que se me va a dificultar la vida en Internet en Corea por no usar IE+ActiveX?

    1. Julio Post author

      Yo también soy usuario de Linux, y por tanto, no me queda otra que tener una máquina virtual con Windows para hacer algunas cosas. Y aun así, es habitual que algo falle, o que tengas que bajarte un active X de 50Mb antes de poder ver una página. Realmente insoportable.

      El peor caso fue tratando de comprar un vuelo a Taiwan, desde Seúl, con Asiana (aerolínea coreana). No fue difícil, fue simplemente imposible. Al final acabé comprando en otra aerolínea…

      1. Sergio Andrés

        Pero, en vez de instalar una máquina virtual se podría hacer lo mismo usando Internet Explorer + Active X con Wine, no crees? Lo has probado?

        Aún así, muy difícil de tragarse ese sapo de que Microsoft tiene ganado Corea T_T

        1. Julio Post author

          Antes tenía Explorer con Wine, pero a la 3ª página que cargaba sus active-x, y tenías que bajar montones de basura, lo dejé. De todas formas, en la máquina virtual también acaba siendo complicado.

          Por suerte no uso normalmente webs coreanas, a excepción del mapa de naver.com, que funciona bien en Frirefox y Chromium…

    1. Julio Post author

      Jajaja… en realidad los puntos 5 y 6 entraron con calzador para redondear a 10 cosas.

Comments are closed.